El joven y ascendente piloto británico George Russell había ganado este domingo el Gran Premio de Bélgica de Fórmula 1, disputado en el circuito de Spa, resistiendo a pie firme los intentos del otro piloto de Mercedes, el también inglés Lewis Hamilton, por superarlo en las vueltas finales. Hubo fotos, los festejos acostumbrados, el champán para el vencedor... pero cuando llegó el momento de poner el auto del ganador en la balanza, no llegó a los 798 kilos establecidos como "peso mínimo". Le faltó exactamente 1,5 kilos, y los comisarios de la FIA hicieron lo que había que hacer, descalificaron a Russell, por lo que el veterano multicampeón Lewis Hamilton quedó finalmente como ganador.
"Nada que decir, el reglamento debe cumplirse, fue nuestro error que el auto no cumpliera con el peso y debemos respetar la sanción", dijo Toto Wolf, el director de Mercedes cuando le preguntaron del tema.
Russell hizo una carrera espectacular, paró una sola vez, pasó a la punta y luego aguantó los múltiples ataques de Hamilton, que algo sabe del asunto y "solo" fue siete veces campeón del mundo. Pero toda esa alegría del chico británico, se hizo añicos un rato más tarde cuando le avisaron que en la balanza, su Mercedes no había alcanzado el peso mínimo que establece la categoría (798 kilos) y entonces el triunfo quedaba para el inefable Lewis.