Cuánto le llegará a las familias en la boleta dependerá del nuevo esquema de subsidios, cuyos detalles no fueron anunciados por el Gobierno, y en cuánto le habiliten a aumentar a las empresas de distribución y transporte, que pidieron subas de más del 500%.
En la primera audiencia pública durante la presidencia de Javier Milei, el Gobierno anunció que quitará los subsidios al gas en los próximos 3 meses. Desde abril, comenzará a regir un nuevo esquema completamente diferente, y para eso habrá una nueva audiencia pública en marzo, donde se brindarán los detalles. Además, las empresas de distribución y transporte pidieron en la audiencia incrementos de más del 500%. Sin embargo, hay incertidumbre sobre cuál será el impacto final en la boleta que le llega a las familias a sus hogares.
Por primera vez, el Gobierno brindó detalles sobre el futuro de las tarifas de gas. Durante la audiencia pública que se realizó este lunes, el secretario de Energía, Eduardo Rodríguez Chirillo, informó cómo será la quita de subsidios: “Se propone el traslado gradual total del componente precio de gas PIST de las tarifas finales para la readecuación progresiva de subsidios”, dice el powerpoint difundido por el Ministerio de Economía, que no se pudo mostrar durante el streaming.
El traslado gradual del PIST, el cual se adecua en función del precio que resulta del tipo de cambio, se realizará: 33% desde el primero de febrero, 33% desde marzo y 33% desde abril. La quita de subsidios será para todos los usuarios por igual: desde los que figuran como N1 (altos ingresos), hasta los N3 (ingresos medios) y los N2 (los más vulnerables). Mientras se realiza la quita de subsidios, se mantendrá vigente la segmentación actual.
A partir del primero de abril, comenzará a regir un nuevo esquema de subsidios, que será completamente diferente al actual. La “nueva conceptualización”, según describieron en la Secretaría de Energía, consistirá en determinar los ingresos totales de la unidad familiar. Además, se determinará una “canasta energética básica” (que incluya electricidad y gas) que cubra las necesidades básicas de las personas, que se determinará en una cantidad de metros cúbicos o kwH/mes que será el máximo a ser subsidiado. El detalle de esta canasta energética será anunciado en la próxima audiencia pública, que se realizará en marzo. Se tendrá en cuenta los consumos de las distintas zonas del país.
En base a estas dos definiciones, Energía va a “contrastar el costo de esas cantidades con el ingreso del grupo conviviente y limitar la incidencia de ese costo a un porcentaje del ingreso, subsidiando la diferencia”, informaron desde la cartera energética. Así, “el subsidio que otorgará el Estado será el diferencial de cuando el precio de la canasta básica energética supera un porcentaje determinado de los ingresos totales del grupo conviviente”.
De esta manera, el subsidio dejará de ser a la oferta y pasará a ser a la demanda, pero no se informó el cómo, si con una transferencia monetaria a las familias, el uso de algún tipo de tarjeta u otro mecanismo. Durante la audiencia, Chirillo se mostró muy crítico de cómo se otorgan los subsidios energéticos hoy: la actual estrategia fue implementada por su antecesora en el cargo, Flavia Royón, con quien hoy comparte equipo en el Ministerio de Economía, dado que es la secretaria de Minería de la Nación.
Para poder conocerse el impacto en la tarifa final restan conocerse varios detalles. Por un lado, Energía informó que actualmente el usuario paga por el precio PIST de gas 0,7 dólares, esto es, un 17% del total. Por lo que para que se pague el 100% y realizar la quita de subsidios, los usuarios deberían pagar casi 6 veces más el costo del gas. Pero este no es el único componente de la tarifa final. Resta conocerse cuánto le habilitará de aumento el Gobierno a las empresas de transporte y distribución, que pidieron subas de más del 500%.
Además, por la actual segmentación, cada componente de la factura pondera distinto según el tipo de usuario. Pero en general, el precio del gas puede significar la mitad del precio total, por lo que la quita de subsidios se da en el componente que más pesa en la tarifa final. De esta manera, en la transición entre que se quita el subsidio (enero-abril) y se implementa el nuevo esquema (desde el primero de abril), los mayores aumentos se darán en los sectores más vulnerables, que hoy perciben la mayor cantidad de subsidios en el porcentaje de su boleta.